25/1/13

Consideraciones sobre la interpretación 1

En estos tiempos que corren muchos actores y actrices tratan de empatizar con sus espectadores mostrándoles resultados cercanos, por los que pasear gustosamente y dejar caer alguna que otra carcajada, como ocurre con un buen anuncio de coches o una tarde de cervezas.
Pero para eso ya están los anuncios y las cervezas, para acomodarnos.
El teatro nos permite alejarnos de ese falso Estado de Bienestar y caminar otros senderos, a veces poco transitables, que son los que nos llevan a los más bellos paisajes o a descubrir el verdadero color de la nieve.
Dejemos, nosotros los actores, de tratar de asfaltar los campos, de detener la fuerza de los ríos, y aprendamos a colocar cada guijarro a su debida distancia para que el público pueda atravesarlos compartiendo con nosotros el gozo de llegar al otro lado y el miedo de haber estado a punto de ser arrastrado por el caudal.
Quiero decir, enfoquemos la información que queremos dar a nuestros espectadores, amplifiquémosla, despojemos los canales de todo residuo para que aquellos que vienen a vernos tengan los agarres suficientes para mantener el equilibrio, y no un cómodo sofá en el que dormir tranquilos.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

A veces la incomodidad no se debe al cambio de sofá, sino a la ausencia de sus cojines. =)

Carlos dijo...

Qué bueno. Me ha encantado, y estoy completamente de acuerdo contigo.