14/8/08

Volver


Atarse un bumerán a la muñeca
y lanzarlo al infinito:
La manera de viajar del hombre
que conoce la importancia de volver.




4 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuentan algunos que sin volver, siempre se está presente

Anónimo dijo...

Creo que si supiéramos que no fuésemos a volver... no nos iríamos a nunca. Nos aterra tanto el jamás. Nunca nos vamos del todo.

Mayor Tom dijo...

Nunca tuve presente la real trascendencia del volver, mis raíces son de nenúfar.

Gad dijo...

No se vuelve nunca, porque como decía El Heráclito, todo se está yendo, y uno no hace más que seguir la corriente. Más allá de esos estamentos con los que uno puede coincidir y estar en desacuerdo a la vez, qué bueno que hayas vuelto a mi blog (aunque no es el mismo). Que andes bien.